Clases de Yoga

Elongación * Flexibilidad * Tonicidad * Meditación * Relajación * Reeducación postural * Reeducación respiratoria*

-CLASES PARTICULARES


-CLASES GRUPALES (grupos reducidos)


***Consultar horarios***

miércoles, 28 de diciembre de 2016

viernes, 23 de diciembre de 2016

lunes, 28 de noviembre de 2016

lunes, 21 de noviembre de 2016

Clases particulares

El beneficio de las clases de yoga particulares es que son personalizadas, lo que permite un enfoque individual  a lo que cada persona necesita en ese momento trabajar, explorar o mejorar.



jueves, 29 de septiembre de 2016

viernes, 16 de septiembre de 2016

sábado, 10 de septiembre de 2016

jueves, 28 de julio de 2016


domingo, 10 de julio de 2016

viernes, 8 de julio de 2016

Asteya

Asteya forma parte de los cinco yamas o principios éticos del yoga escritos por Patanjali. Significa no robar, no tomar lo que no nos pertenece, no codiciar, ser honrado.



Nos invita a ser desapegados, a descubrir que lo que verdaderamente necesitamos ya lo tenemos en nuestro interior. Por eso es necesario auto-observarnos para conocernos a nosotros mismos y no tener el deseo constante de ser como el otro o de poseer lo que los demás poseen .

No robar no sólo se refiere a cosas materiales, sino también a cosas más sutiles, como el tiempo, el espacio, la confianza, el interés o el amor de los demás. A veces sin darnos cuenta estamos robando inconscientemente. Por ejemplo, cuando robamos la autonomía del otro y no le permitimos que tome sus propias decisiones, aunque yo considere que son las equivocadas. Actuar con asteya es respetar al otro y considerarlo digno y capaz.
Si llegamos tarde a un lugar donde me estaban esperando, estoy robando el tiempo de es persona.
Si exigimos atención y presencia permanente de los demás por temor a estar solos, estamos robando su tiempo y su energía. 
Dejar a nuestros seres queridos que tomen distancia cuando o necesitan, es permitirles su intimidad, no robarles su espacio.
También podemos robar emociones. Por ejemplo, cuando le sacamos la alegría a alguien contándole siempre cosas negativas; no validando y haciendo sentir al otro incapaz con algo que se propone, sin tener en cuenta sus sueños e ilusiones.

Asteya nos enseña a entregar todo lo que podamos, a tomar sólo lo que se nos ofrece y usar sólo lo que necesitemos.

domingo, 22 de mayo de 2016

viernes, 13 de mayo de 2016

jueves, 12 de mayo de 2016

Chakras

Los Chakras son centros de energía sutil que afectan el cuerpo físico, mental  y espiritual. 
Si están equilibrados y desbloqueados, la energía puede circular libremente produciendo bienestar, armonía e integración en todo nuestro Ser.




miércoles, 27 de abril de 2016

sábado, 19 de marzo de 2016

miércoles, 9 de marzo de 2016

Satya



 El segundo de los Yamas en los 8 pasos del Yoga de Patanjali es Satya.
Satya significa no mentir, amor a la verdad. Implica ser honesto y sincero con uno mismo y con los demás, no engañar ni engañarnos. Practicar satya es ver y comunicar las cosas tal cual como son, no como desearía que fueran. Esto requiere una profunda conexión con mi interior para saber realmente cómo me siento, qué es lo que quiero, cómo soy, cómo estoy hoy en este momento. No fingir ni aparentar a los demás ni a mí mismo. No querer convencer o convencerme de que soy alguien que en verdad no soy.


En la práctica de Yoga, tener en cuenta el principio de satya es conocerme y realizar las asanas que estén a mi alcance, a mi cuerpo, a mi estado de ánimo, en fin, a mi realidad de este momento. Está muy emparentado con el primer yama, ahimsa, ya que si me engaño esforzándome en realizar una postura que no es la apropiada para mí, me estoy lastimando y ejerciendo violencia hacia mí mismo.



Satya también requiere un cuidado especial en la forma de hablar, pensar y actuar. Ser honesto y decir lo primero que se me cruza por la mente ante una situación, puede dañar a otros. Por eso es necesario tomar cierta distancia, hacer un espacio para que las palabras surjan desde la profundidad de nuestro ser y no como una reacción violenta y desmedida. Esto es aplicable en una clase de Yoga cuando se propone una postura desafiante y emitimos un prejuicio a veces irracional, por ejemplo pensando que no la podremos hacer o que es muy difícil.  Si nos detenemos un momento y nos damos el tiempo necesario para analizar la postura, quizás llegamos a la conclusión de que esa asana es una excelente opción para realizar y hasta puede llegar a ser muy reconfortante.

martes, 1 de marzo de 2016

Ahimsa en la práctica de Yoga

Ahimsa es el principio fundamental para una vida yóguica. Es el primero de los Yamas o reglas éticas del Yoga
Ahimsa significa "no violencia" y nos invita llevar a una vida en la que cultivemos el sentido de la paz con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. Es no agredir ni lastimar con acciones violentas o dañinas o con pensamientos negativos hacia nosotros y los demás.
A veces la violencia es muy sutil. Por ejemplo, estamos haciéndonos daño a nosotros mismos al no permitirnos el descanso después de un día agotador, al ser indiferentes ante nuestras propias necesidades. La no violencia es el derecho a ser felices y hacer felices a los que nos rodean.
Aplicado a la práctica de las posturas, la no violencia es no realizar ningún movimiento que dañe nuestro cuerpo, reconocer nuestros límites y no querer llegar más lejos de lo que actualmente el cuerpo nos permite. Si al realizar una postura hay dolor, tensión y malestar, hay violencia. Practicar ahimsa en una asana es adaptarla a cada persona y a cada situación particular, respetando la biomecánica del cuerpo y evitando acciones que puedan provocar lesiones en el futuro o un desgaste prematuro del organismo. Por eso es importante aceptar el cuerpo que tenemos y trabajarlo a partir de esa conciencia. No deberíamos forzarnos para llegar a una postura determinada a toda costa, sino adaptar la postura a la realidad  de nuestro cuerpo para que éste se sienta cómodo al realizarla. Para ello necesitamos conocernos, amarnos y respetarnos a nosotros mismos.
Ahimsa implica paciencia, empatía, amor y compasión. Yoga no es hacer una postura y "aguantarla" sino, construirla con conciencia y "disfrutarla" mientras la armamos. Lo importante no es la meta sino el camino que vamos construyendo.



lunes, 15 de febrero de 2016

Séptimo chakra - Sahasrara

Séptimo chakra
El séptimo chakra, llamado Sahasrara, está ubicado en la coronilla.

El color con que se lo identifica es el violeta o el blanco. El violeta representa la transformación en el alma y el espíritu hacia nuevas dimensiones, mientras que el color blanco, al contener todos los matices cromáticos, integra todos los planos de la existencia y abre el alma hacia el conocimiento. De este modo, para que el séptimo chakra trascienda, debemos abrir e integrar todos los demás chakras, empezando los inferiores, relacionados con lo material e individual; pasando por el corazón, que integra el ser individual con el ser espiritual, y los chakras superiores, que nos conectan con la sabiduría y el poder universal.

Este chakra rige la glándula pineal y el sistema nervioso central. 

El mandala de Sahasrara es una flor de loto de mil pétalos, que simboliza su carácter universal e infinito.

Las piedras asociadas al séptimo chakra son la amatista y el cristal de roca.

El aroma que identifica este chakra es el incienso y el loto.

Sahasrara es el más sutil y espiritual de todos los chakras. Es el último en activarse, ya que requiere un profundo trabajo espiritual. 
Al abrir los chakras anteriores, obtenemos ciertas capacidades, como la estabilidad, la creatividad, la voluntad, la compasión, la conexión con la voz interior y la intuición. Si se realiza un trabajo espiritual profundo integrando cada uno de estos chakras en forma paulatina y armoniosa, se alcanzará la unión con el infinito

Si el séptimo chakra se encuentra desequilibrado, nos sentiremos desamparados, desinteresados en la espiritualidad, perdiendo el respeto por los demás al creernos poseedores de la verdad.

Al activar y equilibrar el séptimo chakra se llega a la liberación e iluminación, al amor universal, a la conexión con el TODO, a la UNIDAD. Es la expresión más sagrada de nosotros mismos, nos conecta con la verdadera esencia de nuestro ser. Al llegar a ese estado de iluminación, la sabiduría guía cada uno de nuestras acciones, pensamientos y palabras. Estamos en armonía permanente, sabiendo que formamos parte de un orden superior.
Sahasrara chakra nos da serenidad y paz mental.


Algunas de las posturas que facilitan la apertura del séptimo chakra son: vela, paro de cabeza, loto o semi loto, meditación y pranayamas (en especial nadi sodhana)




Paro de hombros/vela
Paro de cabeza


Loto
Meditación


Nadi Sodhana Pranayama





domingo, 7 de febrero de 2016

viernes, 5 de febrero de 2016

El camino del Yoga en 8 pasos

Los Yoga Sutras son una serie de 196 versos o aforismos escritos por un gran sabio indio, Patanjali en el siglo II DC . En este texto se exponen pensamientos filosóficos y psicológicos que intentan explicar la naturaleza del mundo, el origen de lo conocido, la causa del sufrimiento y la manera de alcanzar la liberación para regresar a la conciencia pura.


En los Yoga Sutras, Patanjali explica el camino hacia la liberación y la evolución espiritual a través de ocho pasos complementarios entre sí.  Es lo que se conoce con el nombre "ashtanga", que significa unión de ocho miembros. Estos pasos son: yamas (principios éticos hacia los demás), niyamas (comportamiento hacia uno mismo), asanas (posturas), pranayamas (control de la energía vital a través de la respiración), pratyahara (retirar los sentidos hacia los objetos externos), dharana (concentración), dhyana (meditación) y samadhi (liberación).
De la conquista de estos ocho miembros aparece la luz del conocimiento.


sábado, 23 de enero de 2016

Sankalpa


Un sankalpa es una afirmación positiva, un propósito, intención  o resolución personal.
No es sólo el deseo de alcanzar una meta personal, sino una intención librada al Universo, con la certeza de que se cumplirá si realmente es lo más apropiado para cada uno de nosotros. Por eso hay que prestar mucha atención al crear el sankalpa. Una intención auténtica debe venir desde el corazón. Debemos preguntarnos qué es lo que esperamos para nuestra vida, qué es lo que sentimos que estaría en armonía con el Universo y así, poder identificar el deseo más sincero. Podemos imaginarnos que ese deseo ya se ha realizado y visualizarnos a nosotros mismos en este momento actuando y sintiéndonos de la manera que lo haríamos si esa meta estuviera ya concretada.

El propósito del sankalpa es transformar nuestro patrón de vida en positivo. Debe ser una frase corta, concisa, afirmativa, en primera persona y en tiempo presente. Una vez que hemos elegido la frase, la repetiremos mentalmente tres veces en estado de relajación, con seguridad y convicción de que se hará realidad. El sankalpa actúa como una orden a nivel consciente y subconsciente, convirtiéndose en una creencia y por ende una realidad para nosotros.

  • Gozo de excelente salud física y mental.
  • Potencio mis cualidades espirituales.
  • Tengo seguridad en la toma de decisiones.
  • Vivo en armonía con mis seres queridos.
  • Obtengo el trabajo que deseo.
  • Disfruto con mi pareja.
  • Tengo éxito en mis emprendimientos.

Horarios de Febrero


Actividades 2016


viernes, 15 de enero de 2016

Aceptar el presente


Cuando acepto las cosas tal como son, ya no me molestan. Cuando tomo conciencia de mi realidad sin negarla ni deformarla, tengo la libertad para decidir cambiar, permanecer así o modificar algunos aspectos. A veces tendemos a quedarnos en el pasado y pensar en todo lo que hicimos mal, en los fracasos, en lo que nos hubiera gustado que pasara y no pasó, en aquellas personas que "nos defraudaron"o que no actuaron como esperábamos. Otras veces quizás nos vemos esperando algo que nunca llega, viviendo apresuradamente para alcanzar una promesa de felicidad en el futuro, ansiando ser como no soy o queriendo tener lo que no tengo.
Permanentemente vamos del pasado al futuro, de lo que fue, de lo que tendría que haber sido, de lo que será y de lo que me dijeron que tenía que ser. Pero muy pocas veces podemos permanecer en el presente, así como se presenta hoy. ¡Qué difícil es aceptar ese presente! Aceptar no es lo mismo que resignarse. Resignarse es abandonar todo esfuerzo, dejar que suceda sin actuar, sin responsabilizarme de mis decisiones. Aceptar es saber que esa es mi realidad, así soy yo, así es mi mundo y así vivo hoy. Aceptar es tener la capacidad de vivir el presente tal cual es, con conciencia. Es tener conocimiento de la situación actual para poder encauzar la energía hacia la dirección más apropiada. Aceptar también es saber que soy libre de transitar ese presente, de entender que no siempre tengo que cambiarlo. A veces puedo elegir que las situaciones sigan así y otras veces puedo elegir modificarlas y trascenderlas. Puede ser que aún no esté preparada para el cambio o que esté juntando fuerzas para una transformación.  Un "No" no significa "No para siempre". A veces quiere decir "No ahora" o "No de esta forma".

Una manera de centrarnos en el presente es a través de la respiración. Cuando sentimos que los pensamientos nos invaden podemos llevar la atención a la forma en que estamos respirando ahora, en este momento. Tomar conciencia si estamos moviendo la parte alta del tórax o si el abdomen se expande, si el ritmo es agitado o pausado. Así podremos darle  un descanso a la mente para luego decidir si queremos seguir con esos pensamientos o no. Cuando las emociones son muy fuertes, el hecho de detenernos para observar nuestra respiración nos permite tomar cierta distancia y sentir esas emociones desde otro lugar. La respiración consciente nos ayuda a conectarnos con nosotros mismos y a volver al momento presente.

Cuando acepto mi presente, me doy cuenta de que tengo la libertad de esperar al momento adecuado para el cambio. Me hago responsable de lo que estoy viviendo. Y entonces es cuando aparecen más opciones, soluciones y posibilidades para afrontar diversas situaciones.
Momentos difíciles podemos tener todos, lo que hace la diferencia es la actitud que tenemos ante ellos.

“Lo que niegas, te somete. Lo que aceptas, te transforma.” Carl Jung